Lerner, un joven inconsciente pero seguro de sí mismo, se embarca en una audaz empresa engatusado por una exuberante estafadora, la señora Hanhaus, con la que decide viajar al Ártico para anexionar al Imperio alemán una isla sin dueño. A través de esta aventura, basada en un capítulo real de la historia colonial alemana, Mosebach traza con gran destreza y fina ironía un retrato feroz con la «conciencia humorística de la historia» que le reconoció el jurado del premio Georg Büchner.