En 2002, Jorge Semprún impartió tres conferencias dedicadas al filósofo Edmund Husserl, al historiador Marc Bloch y a George Orwell, en las que nos retrotrae a la ebullición cultural y socio-política que Europa vivió en los años treinta, y defiende la fe en los valores democráticos como única salida al laberinto en que parece adentrarse Europa en este nuevo siglo. En 2010, Jorge Semprún pronunció uno de sus discursos más emotivos en el campo de concentración de Buchenwald, reproducido en este libro. Tras ese discurso, y a lo largo de varios meses, Semprún mantuvo iluminadores diálogos con el cineasta francés Frank Appréderis, en los que desgranó los hitos de su azarosa existencia.