Miguel Labordeta Subías (Zaragoza, 1921-1969), estudió historia en la Universidad de Zaragoza. Es autor de varios libros de poesía: Sumido 25 (1948); Violento idílico (1949); Transeúnte central (1950); y Epilírica (1961). Preparó dos antologías de su propia obra: Memorándum (1960) y Punto y aparte (1967); así como un drama simbolista: Oficina de horizonte (1955). Estos tres títulos ocupan una zona intermedia en su obra. Muere prematuramente pocos días antes de poder ver la edición de su último libro: Los soliloquios (1969) y deja un inmenso volumen de inéditos, transcritos por Clemente Alonso Crespo en su tesis doctoral y publicados en Obra completa, tres vols., 1983. Rosendo Tello y el citado Clemente Alonso Crespo han rescatado otros títulos: Autopía (1972); y Los nueve en punto (1981) y Abisal cáncer (1994), respectivamente.
Pedro Vergés reunió los poemas sueltos publicados en revistas en La escasa merienda de los tigres y otros poemas (1975). Miguel Labordeta, que parte de la difícil vanguardia de posguerra, emprende una aventura poética muy personal que lo confirma como una de las voces más intensas, originales e interesantes de nuestra poesía contemporánea, una de las que han conseguido resistir la marea de las modas y cambios de gusto.