En España apenas existen trabajos que aborden la historia de uno de los grupos armados más violentos de la historia reciente de América Latina, que dejó su pasó más de 30.000 víctimas de acuerdo con las cifras dadas por la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, como es el caso de Sendero Luminoso. En palabras de Fernando Harto de Vera, en el prólogo, 0201C;las imágenes que permanecen en el imaginario colectivo de la actividad de Sendero tienen un tinte de delirio surrealista: perros colgados en las farolas de Lima para denunciar la traición de los dirigentes chinos al legado de Mao, Abimael Guzmán entre rejas vestido con un uniforme de rayas que no existía en las prisiones peruanas02026;, hasta la pareja que acabó con la pesadilla senderista, Fujimori y Montesinos, serían dos personajes más propios de una novela que de la realidad0201D;. Esta obra busca suplir una importante carencia académica y aproximar al lector a la comprensión de cómo fue el origen, desarrollo, auge y colapso del grupo armado más importante de la historia política de Perú.
Las imágenes que permanecen en el imaginario colectivo de la actividad de Sendero tienen un tinte de delirio surrealista: perros colgados en las farolas de Lima para denunciar la traición de los dirigentes chinos al legado de Mao, Abimael Guzmán entre rejas vestido con un uniforme de rayas que no existía en las prisiones peruanas02026; hasta la pareja que acabó con la pesadilla senderista, Fujimori y Montesinos, serían dos personajes más propios de una novela que de la realidad. Pero la función de las ciencias sociales es hacer inteligible este delirio sangriento que le costó la vida a más de 30.000 personas de acuerdo a las cifras dadas por la Comisión de la Verdad y la Reconciliación. En este sentido, el lector tiene ante sí una obra que no me cabe la menor duda de que contribuirá a responder a los múltiples interrogantes que se ciernen sobre la extrema violencia senderista que azotó sin piedad a Perú durante la década de los ochenta del siglo pasado.