A Fer, a Hopi, a Papabertie y también a su nuevo amigo, Basilio, les gusta mirar la luna. Y parece que últimamente está triste. Fer está dispuesto a viatjar hasta ella para ver qué le pasa pero no sabe cómo hacerlo. Casualmente, el señor Jules, el dueño de Básil, está construyendo un globo de colores muy grande: el NAUTILUS.